Los pilotos de MotoGP™ parecen ganar solos, pero todos disponen de un equipo completo e incluso un fabricante detrás de ellos. Mecánicos e ingenieros experimentados, que a menudo duplican la edad del piloto, le dan la mejor motocicleta posible y le ayudan a sentirse a gusto. Este apoyo es a menudo el arma secreta detrás de muchos campeones, especialmente cuando son muy jóvenes.

El Petronas Yamaha SRT, dirigido por Johan Stigefelt, parece haber encontrado oro con Fabio Quartararo. El equipo de Malasia apostó por el francés de 20 años, una estrella en ascenso que parecía haber perdido el rumbo desde su difícil debut en Moto3 con tan sólo 15 años y un salto complicado a Moto2. Quartararo necesitaba guiaje para exprimir su increíble talento natural.

“Comenzamos desde lo más elemental”, afirma el jefe de equipo Diego Gubellini, “explicándole cada una de las intervenciones que estábamos haciendo en la moto, y siguiendo paso a paso para que pudiera comenzar a comprender y experimentar los cambios de configuración y así volverse más y más sensible a la bicicleta. Fabio me impresionó con su enfoque.

“Siempre trata de adaptarse a la moto, y no al revés. Si no consigue los tiempos de vuelta, pregunta: “¿Qué puedo hacer para mejorar?” Es una actitud ganadora que pertenece a los campeones. En segundo lugar, es un animal de carreras. Está muy lúcido durante toda la carrera. Me di cuenta de la precisión con la que se explica después de los briefings”.

La revelación llegó en España cuando, a los 20 años y 14 días, Quartararo se convirtió en el piloto más joven en conseguir la pole position de la categoría reina, un récord que anteriormente pertenecía al siete veces campeón mundial Marc Márquez. Quartararo ha ganado desde entonces dos poles más, así como también ha subido al podio de carrera en Catalunya y Assen. Posiblemente, esto sea una señal de futuros éxitos.